¿Te gustaría sorprender a tu familia con un postre rápido, fácil y delicioso? ¡Estás en el lugar indicado! En este artículo, te enseñaré cómo preparar unos exquisitos bocaditos de corazón de mermelada sin necesidad de horno ni levadura. Con ingredientes simples que seguramente ya tienes en tu cocina, podrás disfrutar de este manjar en cuestión de minutos. ¿Estás listo para adentrarte en el mundo de los sabores dulces? ¡Vamos a empezar!
Ingredientes
- Mermelada de albaricoque
- 1 huevo
- Azúcar en polvo
- Aceite de maíz para freír (o girasol)
- 250 g de yogur natural (o kéfir)
- 50 g de azúcar en polvo
- Azúcar de vainilla (al gusto)
- 1 huevo
- 300 gramos de harina
- 7 g de levadura en polvo.
Preparación de la Masa
Para empezar, en un recipiente hondo, vierte el yogur y agrega el huevo, el azúcar en polvo y la vainilla. Utiliza un batidor para incorporar los ingredientes hasta obtener una mezcla homogénea. Luego, añade la harina tamizada y el polvo para hornear en dos etapas. Inicialmente, mezcla con una espátula y luego amasa con las manos hasta lograr una masa suave y no pegajosa.
Extensión y Corte de la Masa
Espolvorea un poco de harina sobre una superficie de trabajo y transfiere la masa sobre ella. Extiéndela con un rodillo hasta obtener una lámina delgada de forma rectangular. Luego, corta la lámina en tiras de aproximadamente 4-5 cm de grosor utilizando un cuchillo especial para masa con hoja dentada.
Relleno con Mermelada
Coloca una cucharadita de mermelada de albaricoque en la mitad de las tiras de masa, dejando una distancia entre cada porción. Luego, pincela los bordes de las tiras con clara de huevo para sellarlas. Toma las tiras limpias una a una y colócalas sobre las que tienen mermelada, presionando bien los bordes con los dedos.
Fritura de los Bocaditos
Calienta suficiente aceite vegetal en una sartén y añade los bocaditos. Fríelos a fuego medio por ambos lados hasta que estén dorados. Una vez listos, retíralos y colócalos en un plato forrado con toallas de papel para eliminar el exceso de aceite.
Decoración y Servir
Espolvorea los bocaditos con azúcar glass y sírvelos con una bebida caliente. ¡Prepárate para disfrutar de un postre irresistible junto a tus seres queridos!
Consejos Útiles
- Al momento de cortar la masa, si no tienes un cuchillo especial, puedes sellar los bordes con los dedos para evitar que se desarmen durante la fritura.
- Puedes experimentar con diferentes sabores de mermelada para variar el sabor de los bocaditos.
- Asegúrate de que el aceite esté a la temperatura adecuada antes de freír los bocaditos para obtener un dorado uniforme y evitar que se vuelvan aceitosos.
Preguntas Frecuentes (FAQs)
¿Puedo utilizar otro tipo de mermelada?
Sí, puedes utilizar cualquier mermelada de tu preferencia según tus gustos personales. Desde fresa hasta frambuesa, ¡las opciones son infinitas!
¿Se pueden hacer bocaditos más grandes?
Claro, puedes ajustar el tamaño de los bocaditos según tu preferencia. Solo asegúrate de adaptar el tiempo de fritura para garantizar que se cocinen adecuadamente en el centro.
¿Puedo hornear en lugar de freír los bocaditos?
Sí, puedes hornear los bocaditos a 180°C durante aproximadamente 15-20 minutos o hasta que estén dorados. Sin embargo, la textura final puede variar ligeramente.
¿Cuánto tiempo puedo almacenar los bocaditos?
Los bocaditos se mantendrán frescos durante aproximadamente 2-3 días en un recipiente hermético a temperatura ambiente. Si deseas conservarlos por más tiempo, guárdalos en el refrigerador.
¿Se pueden congelar los bocaditos?
Sí, puedes congelar los bocaditos una vez estén completamente fríos. Colócalos en una bandeja para congelar en una capa única, luego transfiérelos a una bolsa o recipiente hermético. Para consumirlos, simplemente déjalos descongelar a temperatura ambiente y luego caliéntalos en el horno o en el microondas.